LA PRODUCCIÓN AGRÍCOLA ENFRENTA DESAFÍOS COMO LA SEQUÍA, Y LA GRIPE AVIAR

Al igual que otros sectores del campo, la avicultura se vio golpeada por la pandemia, que alteró los mercados y aumentó los costos, especialmente en un sector intensivo en mano de obra.

Además, la prolongada sequía y la aparición de la gripe aviar a fines de febrero pasado agravaron aún más la situación. La gripe aviar obligó a suspender todas las exportaciones avícolas, lo que significó un golpe difícil de superar en un año ya complicado para la actividad. Antes de estos desafíos, la producción avícola experimentó un crecimiento sostenido desde la década de 1990, cuando el consumo per cápita apenas rondaba los 9 kilos por habitante. A lo largo de los años, el consumo aumentó hasta alcanzar niveles similares a los de la carne vacuna, llegando a 47 kilos por habitante al año. Esto permitió un crecimiento en la producción de carne aviar, que alcanzó las 2,5 millones de toneladas por año.

Sin embargo, la imposibilidad de exportar durante casi seis meses ha obligado a reducir drásticamente la producción, ya que el consumo interno no puede absorber semejantes cantidades. En 2022, se exportaron alrededor de 253,000 toneladas de carne aviar por un valor de aproximadamente 400 millones de dólares. La interrupción de las exportaciones llega en un momento en que los precios internacionales están mostrando cierta recuperación, lo que aumenta la importancia de las negociaciones sanitarias en curso.

China es uno de los principales destinos de exportación de la producción avícola argentina, representando aproximadamente el 30% del total exportado. En total, los cuatro principales mercados (China, rito Halal, Sudáfrica y Chile) absorben el 75% de las exportaciones avícolas. Es crucial llevar a cabo una misión sanitaria a China para asegurar la reapertura de las exportaciones y liberar las restricciones que actualmente impiden el comercio de animales vacunados. Aunque inicialmente los compradores internacionales pueden rechazar productos avícolas provenientes de animales vacunados, se espera que en el futuro se acepte la vacunación y los productos argentinos.

A pesar de la afectación por la gripe aviar, Argentina ha logrado mantener un bajo porcentaje de afectación, alrededor del 2.5%. Esto permite la posibilidad de renegociar contratos garantizados y buscar soluciones para reactivar la producción avícola. Sin embargo, la producción ya se ha visto considerablemente afectada, disminuyendo de 23,000 toneladas por mes a aproximadamente 12,000 toneladas, y se espera que las exportaciones se reduzcan a solo 175,000 toneladas. En conjunto, estas circunstancias adversas afectan a alrededor de 80,000 personas que trabajan en la industria avícola.

A pesar de los desafíos, los líderes del sector avícola expresan su confianza en las negociaciones sanitarias en curso y esperan que se levanten las restricciones a la producción y las exportaciones. La actividad avícola en Argentina ha sido fundamental para el crecimiento del sector agroindustrial y la generación de empleo en el país. Con el levantamiento de las restricciones y la recuperación de los mercados internacionales, se espera que la producción avícola pueda recuperarse y seguir contribuyendo al desarrollo económico del país.

Mientras tanto, en otra área del sector agropecuario, se realizó el lanzamiento de la edición 23 de la tradicional exposición "La Ganadera" de la Sociedad Rural en Palermo. Esta exposición, que comenzará el próximo 20 de julio y se extenderá hasta el domingo 30, reunirá a más de 400 expositores, representando a 14 provincias, y contará con la participación de unos 2,000 animales. Además, se conmemorarán los 100 años de la Asociación de Caballos Criollos y los 200 años de la llegada al país de la raza Shorthorn (Tarquino), que fue fundamental para la ganadería argentina.