AUMENTAN LAS INFECCIONES RESPIRATORIAS: CÓMO PREVENIRLAS EN TEMPORADA INVERNAL

Con la llegada de la temporada invernal, los casos de infecciones respiratorias experimentan un notable incremento. Esta tendencia es habitual en esta época del año debido a varios factores que favorecen la propagación de virus y bacterias responsables de estas afecciones. Es fundamental entender las causas y tomar medidas preventivas para reducir el riesgo de contagio y proteger nuestra salud.

Factores que Favorecen las Infecciones Respiratorias

1. Bajas Temperaturas: Durante el invierno, las bajas temperaturas contribuyen a la disminución de las defensas naturales del organismo. El frío puede afectar el sistema inmunológico, haciéndolo más vulnerable a los patógenos.

2. Ambientes Cerrados: Las personas tienden a pasar más tiempo en espacios cerrados y mal ventilados, lo que facilita la transmisión de virus y bacterias. El contacto cercano en lugares como oficinas, escuelas y transportes públicos aumenta las posibilidades de contagio.

3. Humedad y Seco: Los sistemas de calefacción tienden a reducir la humedad en el aire, lo que reseca las mucosas nasales y facilita la entrada de patógenos. Por otro lado, en regiones con alta humedad, los virus también pueden sobrevivir más tiempo en el ambiente.

4. Agentes Patógenos: Virus como el de la gripe, el resfriado común y el SARS-CoV-2, y bacterias como el Streptococcus pneumoniae, son más activos y resistentes durante el invierno.

Medidas de Prevención

1. Higiene Personal: Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón es una de las medidas más efectivas para prevenir infecciones. El uso de desinfectantes de manos a base de alcohol también es recomendable cuando no se dispone de agua y jabón.

2. Vacunación: La vacunación contra la gripe y otras enfermedades respiratorias es crucial. Las vacunas ayudan a reducir la incidencia y gravedad de estas infecciones.

3. Buena Ventilación: Asegurar una adecuada ventilación en los espacios cerrados es fundamental. Abrir ventanas y permitir la circulación del aire ayuda a disminuir la concentración de patógenos en el ambiente.

4. Uso de Mascarillas: El uso de mascarillas puede ser una herramienta eficaz, especialmente en lugares con alta concentración de personas o cuando se está en contacto con individuos enfermos.

5. Hidratación y Alimentación: Mantener una buena hidratación y una alimentación equilibrada refuerza el sistema inmunológico. Consumir frutas y verduras ricas en vitaminas y minerales es esencial.

6. Evitar el Contacto con Personas Enfermas: Minimizar el contacto con personas que presenten síntomas de infecciones respiratorias es una medida preventiva importante. Si es necesario estar cerca, mantener una distancia adecuada y usar mascarilla.

7. Cuidado del Entorno: Limpiar y desinfectar regularmente superficies de uso común como picaportes, mesas, y dispositivos electrónicos, contribuye a reducir la transmisión de patógenos.