EXFUNCIONARIO DE INTELIGENCIA AFIRMA QUE EL VATICANO ESCONDIÓ LA APARICIÓN DE OVNIS

En una entrevista reciente, David Grusch, un ex funcionario de inteligencia y veterano de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, ha sacudido los cimientos de la comunidad internacional con sus afirmaciones sobre la relación entre el Vaticano y los avistamientos de objetos voladores no identificados (OVNIs). Sus declaraciones sugieren un encubrimiento a gran escala por parte del Vaticano y otros gobiernos.

Las declaraciones de Grusch cobran relevancia en el contexto de una audiencia del Comité de Supervisión de la Cámara que exploró los "Fenómenos anómalos no identificados: implicaciones en la seguridad nacional, la seguridad pública y la transparencia del gobierno". En esta audiencia, Grusch y otros ex militares dieron testimonio sobre la existencia de estos fenómenos y cómo han sido tratados por diversos gobiernos.

Uno de los aspectos más notables de las afirmaciones de Grusch es la sugerencia de que el Vaticano ayudó a ocultar la aparición de un OVNI en 1933 en Magenta, Italia. Según su versión, el gobierno italiano, bajo el mando de Benito Mussolini, mantuvo esta información en secreto hasta casi el final de la Segunda Guerra Mundial. Se afirma que un vehículo aéreo no identificado fue recuperado parcialmente intacto y almacenado en una base aérea segura en Italia. Grusch alega que, gracias a la colaboración del Vaticano, Estados Unidos habría obtenido acceso a esta nave.

El ex funcionario también sostiene que la Iglesia Católica estaba al tanto de la existencia de vida extraterrestre y habría sido cómplice en el encubrimiento. Si bien no se han presentado pruebas concretas que respalden estas afirmaciones, Grusch insiste en que el Vaticano "ciertamente" tenía conocimiento de la vida extraterrestre.

Sin embargo, tanto el Departamento de Defensa (DOD) como la NASA han negado enérgicamente la existencia de evidencia de vida extraterrestre o de un programa gubernamental relacionado con OVNIs. Estas instituciones afirman que no tienen información que respalde las afirmaciones de Grusch y mantienen una postura de escepticismo en relación con los fenómenos anómalos no identificados.