LA INDUSTRIA DEL SICARIATO SIGUE CRECIENDO EN ROSARIO, 3 HOMICIDIOS EN 24 HORAS

La ciudad de Rosario vivió un domingo trágico, marcado por una ola de violencia que dejó un saldo de tres asesinatos en diferentes barrios, subrayando la intensificación del sicariato en la región. Este aumento alarmante en los crímenes refuerza la preocupante reputación de la ciudad como uno de los epicentros del crimen organizado en Argentina.

Los homicidios, perpetrados con métodos brutales y en horarios escalonados a lo largo del día, están siendo investigados por la fiscal María de los Ángeles Granato del Ministerio Público de la Acusación. Dos de las víctimas fueron asesinadas a balazos, mientras que la tercera fue golpeada fatalmente con un martillo, según los primeros indicios encontrados en la escena del crimen.

El último de estos ataques se registró pasadas las 20:30 en la calle Cagancha al 3800, en la zona sudoeste de la ciudad. Según informaron fuentes policiales, los agentes del Comando Radioeléctrico llegaron al lugar tras recibir avisos de disparos. Los vecinos indicaron que los disparos se produjeron en la planta alta de una residencia, donde posteriormente se encontró a un hombre, aún no identificado, con múltiples heridas de bala en el tórax, cerca del baño.

En la escena del crimen, los peritos forenses incautaron once vainas servidas de calibre 9 milímetros y ocho plomos deformados, evidencia de un tiroteo que tuvo lugar en varios ambientes de la vivienda, lo que sugiere que la víctima fue perseguida antes de ser ultimada.

Estos crímenes son un claro indicativo de la gravedad de la situación de seguridad en Rosario, una ciudad que ha visto un aumento en la contratación de sicarios, relacionada frecuentemente con ajustes de cuentas entre bandas delictivas. El hecho de que estos asesinatos se sucedan con una frecuencia alarmante es un llamado a la acción para las autoridades locales y nacionales, que deben reforzar las estrategias para combatir el crimen organizado y restaurar la paz en las calles de Rosario.