LAS CONSECUENCIAS ECONÓMICAS DE LA SEQUÍA COMENZARON A SENTIRSE

La economía argentina ya está sintiendo los efectos de la sequía, incluso con mayor impacto y anticipación de lo previsto. Los recientes datos oficiales publicados muestran que en enero se produjo un fuerte golpe en la recaudación y las importaciones, lo que difícilmente se revertirá en los próximos meses. Este problema va más allá de las dificultades para mantener el nivel de reservas y cumplir con el acuerdo con el FMI en 2023.

En consecuencia, enero marcó el retorno de los déficits gemelos, ya que tanto la situación fiscal como la balanza comercial registraron importantes déficits. La disminución de las exportaciones resultó en un déficit de USD 484 millones en la balanza comercial para enero, mientras que el año pasado había alcanzado un superávit de casi USD 300 millones. "Las exportaciones alcanzaron su nivel más bajo en los últimos dos años, y es necesario retroceder hasta febrero de 2021 para encontrar un valor inferior. Desde junio de 2016, excluyendo el año 2020 en plena pandemia, no habían registrado una caída tan pronunciada en términos anuales", señaló un informe elaborado por la consultora Abeceb.