PAMI SIGUE HACKEADO, PERO ASEGURAN QUE LOS MEDICAMENTOS ESTÁN A SALVO

Han pasado siete días desde que los sistemas informáticos del PAMI fueron víctimas de un ciberataque, lo que generó preocupación entre cientos de miles de jubilados y jubiladas de toda Argentina que dependen de los servicios de la obra social. Si bien la situación generó dificultades en la realización de trámites virtuales a través de la página web del organismo, las autoridades aseguran que las prestaciones médicas y los medicamentos no han sido comprometidos.

El miércoles pasado, el PAMI comunicó públicamente el ciberataque que había afectado sus sistemas informáticos. Aunque indicaron que la situación estaba bajo control, implementaron un plan de contingencia que incluyó la suspensión de las plataformas afectadas para garantizar la seguridad de los datos y la continuidad de los servicios esenciales.

En un intento por brindar tranquilidad a los jubilados y jubiladas, fuentes del PAMI señalaron que "la información de servidores está protegida" y que se han tomado medidas para restablecer los pagos, medicamentos y prestaciones. Una de las decisiones clave fue la emisión de recetas y órdenes médicas en formato papel, emitidas por los médicos de cabecera y profesionales de la salud, en lugar de a través de los sistemas informáticos comprometidos.

Las consultas médicas, prácticas y derivaciones también se realizarán mediante recetas en papel, siguiendo el mismo mecanismo que es comúnmente utilizado por prepagas y obras sociales. Si bien este cambio podría generar inconvenientes temporales para aquellos que estaban acostumbrados a los trámites virtuales, el objetivo principal es garantizar que los servicios médicos y los suministros de medicamentos no se vean afectados.

A pesar de la interrupción en los trámites en línea, el PAMI está trabajando activamente para reforzar la seguridad de sus sistemas y restablecer la normalidad en la medida de lo posible. La rápida respuesta del organismo y la implementación de medidas de contingencia demuestran su compromiso con el bienestar de los jubilados y jubiladas que dependen de sus servicios.