ARGENTINA YA ES PARTE DE LOS BRICS

En un anuncio histórico, los líderes de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, conocidos como el bloque BRICS, han acordado la inclusión de Argentina en este grupo de economías emergentes. La noticia fue comunicada por la vocera presidencial Gabriela Cerruti a través de la plataforma X (anteriormente conocida como Twitter).

La decisión marca un paso significativo en la expansión de este bloque, que ahora pasará a ser BRICSA con la incorporación de Argentina, y también de otras naciones como Arabia Saudita, Egipto, Etiopía, Emiratos Árabes Unidos e Irán. Esta acción establece una nueva etapa en el papel y la influencia de los países del Sur global en la arena internacional.

El miércoles previo al anuncio, los líderes de BRICS habían acordado mecanismos para considerar la admisión de nuevos miembros, allanando el camino para la inclusión de varias naciones interesadas, incluida Argentina. El bloque se compromete a defender los intereses y las perspectivas del Sur global en un momento en que la geopolítica mundial se encuentra polarizada.

La ministra de Asuntos Exteriores de Sudáfrica, Naledi Pandor, compartió en Ubuntu Radio que se había llegado a un acuerdo sobre la expansión durante una reunión celebrada durante una cumbre de tres días en Sudáfrica. Con más de 40 naciones manifestando interés en unirse al grupo, la decisión de agregar a Argentina como miembro resalta su potencial para aportar desarrollo financiero y económico al bloque.

La postulación de Argentina, al igual que la de otras naciones como Argelia, Bangladesh, Cuba, Egipto, Etiopía, Irán y Vietnam, fue directa y decidida. Además, hubo países que expresaron su interés en unirse, como México, Pakistán y Turquía.

La inclusión de Argentina en BRICS no solo fortalece la base económica y política del bloque, sino que también promete ampliar su influencia global en un momento en que actores como China y Rusia buscan establecer un contrapeso viable al predominio de Occidente en la escena internacional. Esta expansión representa una oportunidad para el Sur global de asumir un papel más relevante en la toma de decisiones globales.