GOBIERNO NACIONAL BRINDA AYUDA ECONÓMICA A PRODUCTORES AVÍCOLAS

En un esfuerzo por respaldar a los productores avícolas que enfrentan dificultades debido a la emergencia sanitaria provocada por la influenza aviar, el Ministerio de Economía ha destinado una partida de 7.450 millones de pesos. Este apoyo financiero se inserta en el Programa de Asistencia Económica por la Emergencia Sanitaria - Influenza Aviar H5 y H7, el cual fue oficializado el 7 de mayo tras su publicación en el Boletín Oficial.

Los fondos para esta iniciativa provienen del Fondo de Incremento Exportador, que se nutre de una parte de las liquidaciones de divisas provenientes de las agroexportaciones. El programa se mantendrá vigente hasta el 16 de noviembre y su propósito principal radica en ofrecer ayuda a los productores avícolas para paliar el impacto económico derivado del sacrificio sanitario de aves y la destrucción de huevos frescos y fértiles.

Esta asistencia está dirigida a todos los productores avícolas que estén registrados en el Registro Nacional Sanitario de Productores Agropecuarios (Renspa) del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa). Los montos de apoyo económico serán determinados en función de las actas de sacrificio o destrucción emitidas por el Senasa, considerando las categorías de aves sacrificadas y los tipos de huevos destruidos.

La influenza aviar ha generado un impacto significativo en el sector avícola del país, afectando tanto la producción como la comercialización de aves y sus derivados. La implementación de este programa busca proporcionar un respiro económico a los productores afectados, aliviando las cargas financieras que han surgido como consecuencia de las medidas de emergencia sanitaria.

Con esta medida, el gobierno busca no solo apoyar a los productores avícolas, sino también mantener la estabilidad en el sector y garantizar el suministro continuo de productos avícolas a la población. La asistencia económica, proveniente de recursos generados por el sector agroexportador, refleja el compromiso de abordar las crisis de manera colaborativa y solidaria, en beneficio tanto de los productores como de la seguridad alimentaria del país.