LA DEVALUACIÓN IMPACTA EN EL PRECIO DE LOS AUTOS Y EN EL IMPUESTO AL LUJO

La reciente subida del dólar oficial en más del 100% está generando un fuerte impacto en la economía argentina, especialmente en el sector automotor. Los primeros indicios de esta devaluación se reflejan en las listas de precios de vehículos, con incrementos que oscilan entre el 20% y el 60%, dependiendo del modelo. No obstante, la mayoría de las marcas aún no ha definido su estrategia comercial debido a la magnitud de la devaluación y la incertidumbre sobre cómo trasladar la caída del peso a los vehículos nuevos sin quedar afectados por los Impuestos Internos.

Un desafío significativo para el sector es la limitación impuesta por la base tributaria del impuesto al "lujo". Actualmente, todos los vehículos 0km con un valor superior a $14.700.000 deben abonar este gravamen, que implica un aumento de entre el 25% y el 50% en los precios de los autos, dependiendo de la escala aplicada.

Esta restricción ha llevado a que muchos modelos estén "topeados" por debajo de este valor, mientras que los vehículos más accesibles del mercado ya superan los $9.000.000. A pesar de que se están comercializando modelos con sobreprecios, especialmente importados, que superan el límite, estas negociaciones privadas entre concesionarias y compradores no están sujetas al impuesto.

El traslado directo de la devaluación a los precios de los vehículos podría llevar a que todos los autos deban pagar este tributo, provocando aumentos desmedidos. Desde algunas automotrices señalan que, más que generar recaudación, este impuesto se aplica para frenar la salida de dólares, y si no se realiza un ajuste, la caída en las ventas de autos podría impactar negativamente en la recaudación.

Ante esta situación, ya se está considerando un cambio en el impuesto al "lujo" para evitar que menos autos queden alcanzados por esta carga fiscal. Un funcionario del gobierno confirmó que están analizando modificaciones, aunque no se ha establecido un momento preciso para implementarlas. Según el titular de la asociación que agrupa a las terminales (ADEFA), Martín Zuppi, se está trabajando en la posibilidad de eliminar o suspender la primera escala tributaria y ajustar la segunda tasa a un valor más alto, similar a una medida aplicada al inicio de la gestión de Mauricio Macri en 2016.

Es importante destacar que, debido a la devaluación, las automotrices ya no podrán eludir el pago de este impuesto en la Aduana, lo que afectará la posibilidad de "topear" los precios en el mercado. La incertidumbre sobre el funcionamiento de la importación de vehículos 0km tras la eliminación del sistema SIRA también complica la estimación de las automotrices sobre cómo aumentar las importaciones y cómo afrontar los costos asociados.