MONEDAS LOCALES, VUELVE EL FANTASMA DE LAS CUASIMONEDAS EN MEDIO DE LA CRISIS ECONÓMICA

En enero de 2002, mientras "Torero" de Chayanne sonaba en todas las fiestas, las cuasimonedas eran el reflejo de la crisis post-convertibilidad. Ahora, La Rioja propone su propia versión de "Chacho" y otras provincias consideran seguir el ejemplo. Sin embargo, los expertos señalan que la situación actual difiere de la crisis del 2001.

La era de las cuasimonedas, que surgió en 2001 con la provincia de Buenos Aires a la cabeza, parece estar haciendo un regreso. La Rioja ya ha presentado un proyecto de ley para crear su propia moneda provincial, y otras jurisdicciones podrían seguir sus pasos. Aunque los especialistas indican que la situación actual no se compara directamente con la crisis de la convertibilidad, advierten sobre posibles impactos negativos.

Se plantea que, al adoptar cuasimonedas, los agentes económicos pueden buscar deshacerse de estas monedas antes que de otras, lo que podría llevar a una depreciación de su valor. Esto, a su vez, podría generar una inflación adicional a la ya existente. Las empresas en estas provincias podrían enfrentar mayores costos en impuestos nacionales, afectando su rentabilidad.

Nadin Argañaraz, del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), destaca que las finanzas provinciales se verán afectadas por la caída de la recaudación nacional, la disminución de la coparticipación y el ajuste en las transferencias no automáticas. Se espera una merma en la recaudación provincial debido a la menor actividad económica. Argañaraz enfatiza la importancia de la reversión de la eliminación del impuesto a las Ganancias a la cuarta categoría para evitar complicaciones económicas y financieras.

Aunque el escenario de cuasimonedas no es generalizado, las dificultades económicas y fiscales de las provincias podrían llevarlas a considerar estas alternativas. Las negociaciones entre el gobierno nacional y las provincias serán cruciales para encontrar soluciones que fortalezcan el programa económico y eviten medidas extremas como la adopción de cuasimonedas.