TRANSPORTE: SE ABONARÍA SOLO UNA PARTE DE LOS SUELDOS DE LOS CHOFERES Y SE AVECINAN MEDIDAS DE FUERZAS

La situación del transporte público en la ciudad de Santa Fe se encuentra al borde del colapso, con los empresarios del sector advirtiendo que solo podrán abonar entre el 40% y el 50% de los salarios a los choferes, ante la falta de fondos necesarios para cumplir con sus obligaciones salariales completas. Esta crítica coyuntura se da a solo horas del pago de sueldo de los trabajadores, generando una tensión palpable que podría desencadenar en medidas de fuerza que afectarían tanto el servicio urbano como el interurbano.

Gerardo Ingaramo, presidente de la Federación Argentina del Transporte Automotor de Pasajeros, expresó su preocupación ante la inminente crisis: "Hoy vamos a pagar lo que podamos, mañana creería que los trabajadores van a tomar medidas". Ingaramo fue enfático al advertir sobre las consecuencias de un paro en el sector: "Si mañana se para, no se pone más en marcha el transporte en la ciudad".

La raíz del problema parece residir en la decisión del gobierno nacional de no enviar el Fondo Compensador destinado a subsidiar al transporte público de pasajeros por automotor urbano y suburbano del interior del país, una suma que ronda los 250 millones de pesos y que es vital para el sostenimiento del servicio. Este fondo compensador ha sido crucial para equilibrar las finanzas de las empresas de transporte frente a los costos operativos y el mantenimiento de una tarifa accesible para los usuarios.

Además, las empresas enfrentan el desafío de afrontar el desembolso de casi 200 millones de pesos adicionales, correspondientes al aumento de sueldos acordado en las últimas negociaciones paritarias, lo cual agrava aún más la situación financiera del sector.

La posibilidad de un paro de choferes se cierne como una amenaza inminente sobre los ciudadanos de Santa Fe, quienes podrían verse seriamente afectados por la falta de transporte público, un servicio esencial para la movilidad diaria de miles de personas. La situación demanda una respuesta urgente de todas las partes involucradas, incluyendo autoridades locales y nacionales, para encontrar una solución que evite la paralización del transporte y sus consecuencias negativas para la ciudadanía.